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Que el Verde no sea partido no es sorpresa, en Colombia no hay partidos

Ayer Juan Carlos Florez renunció al partido Verde y hoy Jhon Sudarsky retiró su apoyo a Peñalosa. La crítica más frecuente que leí señalaba que así, el partido no sobreviviría, si a la primera pelea todos salían corriendo. Al leerlo sólo pensaba, ¿cuál partido?

En Colombia no hay partidos. Sólo un grupo de personajes que se reúnen con algún propósito específico y temporal y que se disuelve tan rápido como se forma. El tranfugismo sólo oculta lo obvio, aquí la mayoría de personajes trabajando en el sector público (o con éste) van por lo suyo ( $ € £ ó ¥).

De esa mayoría se separan muchos, que van solos, y se reúnen también, según aparezcan las amenazas. Se que en todos los mal llamados partidos hay gente decente, tratando de hacer las cosas bien. Esos mismos tienen criterio para alejarse o separarse cuando hay que hacerlo. Tengo hoy un poco más de respeto por Juan Carlos Florez y el senador Sudarsky.

Pero este post no es sobre el Verde, que tendrá la misma suerte que el PDA, sino del hecho de que en realidad envidio el tener partidos: como los gringos, que se declaran republicanos o demócratas y lo defienden hasta la muerte. Sería un descanso poder identificarse con un colectivo con el que comparta principios fundamentales y donde todo el mundo halara para el mismo lado, en vez de tener que seguir a cada persona y estar pendiente de cada cosa que dice o hace (para poder detectar a los cafres de los decentes).

En Colombia no se castiga a los cafres quitandoles el voto. Sería lo más sencillo, lo más efectivo, lo más racional. Pero, en Colombia no aplica lo sencillo, efectivo y racional. ¿Cómo es posible que después de todo lo que sabemos, Uribe y el Partido de la U tenga algún tipo de apoyo?


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