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Cómo se miden las cosas

Años atrás, mientras ayudábamos a un amigo que estudiaba cine a hacer un corto, filmábamos cerca a Villa de Leyva, donde un campesino nos permitió usar su parcela como locación. Hablando con él, nos contó que habían filmado un comercial de unas camionetas ahí mismo. Y nos dijo, si, eso fue cuando este árbol estaba como más o menos así, y señaló con la mano como a un metro veinte de el piso. El árbol medía en ese momento, tal vez un metro más que eso.

Para él, el tiempo se mide según cuanto crece un árbol. Otro habría dicho cuando el presidente era tal, o cuando tal canción estaba de moda, cuando yo tenía tantos años. Todas formas de medir lo mismo, pero aquella que uno escoge, dice mucho de uno mismo.

La semana pasada, caminando por mi nuevo barrio, tuve otro ejemplo de lo mismo. Paré en una tienda, a ver que encontraba y noté cuan distinto es pedir media libra de carne o tres mil pesos de carne. Se recibe lo mismo, pero la forma de pedirlo, evidencia la urgencia de la persona que lo pide. 

Lo que se dice, a veces queda relegado, por la forma en que uno lo dice.

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